Ganar no lo es todo, hay que ganar jugando limpio.

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06 Dic 2015

Muchas personas se enfocan solo en ganar, el triunfo debe buscarse dentro de las reglas, de otra manera se vence tramposamente.

Los que somos aficionados a los deportes hemos sido testigos de grandes triunfos que se ven opacados porque el equipo que ganó hizo trampa de alguna manera, en el fútbol soccer pueden haber fingido un penal y de esa manera lograr el gol del triunfo, si es en el fútbol americano puede ser un ligero empujón al defensor que permite que el receptor tenga un pequeño espacio y con ello atrapa un pase, si es el beisbol porque se batea con un bate que tiene un compuesto diferente a la madera y permite que la bola vuele más y así en cada deporte hay maneras de hacer trampas, algunas evidentes a los aficionados como los ejemplos anteriores y de las que no se percatan los jueces o trampas más sofisticadas como espiar las señales del equipo contrario como sucedió con los Patriotas de Nueva Inglaterra, los jugadores que toman suplementos para lograr mejorar artificialmente su rendimiento como el ejemplo de Lance Armstrong en ciclismo, entre muchas otras trampas posibles.

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Hay situaciones en que las reglas no parecen justas, por ejemplo durante muchos años en México las elecciones tenían reglas que buscaban favorecer al partido político oficial, pero si los demás partidos políticos las aceptaban o no tenían el poder para cambiarlas su única opción era no participar para no avalar una elección amañada, pero si aceptas las reglas debes jugar con ellas y no quejarte de las mismas una vez que pierdes. Hay licitaciones públicas donde las reglas parecieran diseñadas para favorecer a algún participante, si esto lo notan los demás deben de quejarse antes de que se lleve a cabo la licitación pero no después de que perdieron o fueron descalificados, tratar de hacer ver la injusticia de las reglas a caballo pasado tampoco es jugar limpio, cuando una acepta competir debe conocer las reglas, acatarlas y buscar triunfar en esas circunstancias.

 Si no te gustan las reglas o te parece que están diseñadas para favorecer a alguien, quéjate previo a que inicie la competencia, nunca después.

Hay empresas que son muy poderosas y por lo mismo cuentan con muchos recursos humanos, técnicos y económicos que les permiten establecer recursos legales que les dan una ventaja frente a sus competidores ya que pueden litigar en su beneficio dentro del marco de la ley e incluso enviar a personas para que intenten convencer a los congresistas de que el voto de cierto cambio a una ley se haga en cierto sentido, con la finalidad de verse favorecidos. Finalmente el que lo logren les va a dar la posibilidad de seguir creciendo y por ende mayores ganancias, pero conforme se van volviendo monopólicos u oligopólicos perjudican el mercado y a los competidores más pequeños en perjuicio de los consumidores.

En tu trabajo en ventas, debes buscar triunfar en cada presentación que haces, pero respetando las reglas del juego, en una competencia limpia, viendo el beneficio de tu cliente, buscando las ventajas que obtendrá por medio de tu propuesta a diferencia de lo que obtienen con tus competidores, brindando un mejor servicio con base en dar tu máximo esfuerzo, viendo que tu compañía logré brindar un servicio superior, mejores condiciones de pago y entrega en fin, utilizando todos los medios lícitos a tu alcance para lograr una propuesta competitiva en donde todos ganen y se logre una relación a largo plazo.

Si en los negocios vas triunfando con base en el engaño, brindando ventajas que no están dentro de las reglas del negocio, perjudicando mañosamente a tu competencia, descalificando dolosamente a tus competidores, engañando a tus consumidores, entre muchas otras formas de ganar tramposamente que existen, lograrás un éxito temporal, pero en el largo plazo la verdad saldrá a flote y no podrás mantener las cuentas que has ganado y tu prestigio se verá manchado por la manera como has actuado, por ello debes buscar que el triunfo se logre éticamente.

 El hecho de que haya muchos tramposos en los negocios no significa que éste bien ganar así, vence limpiamente y cuida tu prestigio.