Enfócate en tus posibilidades reales

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13 May 2019

Nada es imposible pero si pesas 140 kilos y quieres ser trapecista primero debes bajar de peso y luego ir al trapecio.

Cuando uno trabaja en ventas y tu principal ingreso depende de las comisiones que generas, estás tentado constantemente a dar un gran golpe, a lograr esa venta que por si sola te ayudará a cumplir con tu meta semestral, la que todos buscan pero solo uno la logra.

Por supuesto no tiene nada de malo buscar grandes cuentas pero debes estar consciente si tu empresa en este momento esta preparada para atender a ese gran cliente, es posible que el tamaño de tu empresa, su capacidad de producción, su política de entrega del producto o servicio, su capacidad financiera, entre muchas otras variables, no le permita en este momento atender a un gran cliente.

Pon tu esfuerzo en aquellas cuentas que si puedes lograr cerrar y busca la sinergia de toda la empresa para lograr esa meta en común.

Hay ocasiones en que ir tras las grandes cuentas que a lo mejor no está nuestra empresa en posibilidad de atender en ese momento nos acaban distrayendo de cuentas medianas y pequeñas que sí podemos ganar. Una cotización muy grande requiere atención de varias áreas de la empresa para que en caso de ganarla pueda ser atendida y tratar de ajustar la empresa a la posibilidad de competir quita tiempo y energía sobre todo en empresas pequeñas y el poco margen de utilidad puede comprometer la viabilidad del resultado

Si tu empresa no es grande o líder en su mercado, dimensiona en conjunto con la alta dirección las cuentas que idealmente pueden atender y concentra tu energía en esos clientes. Conforme estos clientes leales los ayudan a crecer llegará el momento en que estén preparados para ir por los clientes más grandes y conquisten esas cuentas.

Hay excepciones donde puedes ser competitivo para grandes empresas aun cuando no trabajes en una empresa muy grande, esto sucede cuando eres innovador, especialista en un segmento específico o cuentas con una ventaja competitiva que nadie más tiene, ahí si debes ir por todas

En ocasiones no ganar una cuenta demasiado grande y complicada puede ser lo mejor que le pase a tu empresa.