Date tiempo para pensar.

El día en la oficina o en la calle, no nos permite darnos el tiempo para pensar en posibles soluciones a nuestros problemas.

La cantidad de información a la que tenemos acceso diariamente es impresionante, lo que nuestros padres podían ver en un mes, nosotros lo podemos recibir en unos cuantos minutos. Este cúmulo de información nos permite estar enterados al momento de muchos temas que son relevantes para nosotros (aunque en ocasiones no son importantes), tanta información hace que estemos muy ocupados analizando y dividiendo la información que recibimos, adicional al trabajo que generalmente tenemos que desarrollar, la suma de estos factores hace que no dediquemos tiempo a pensar, la mayor parte del tiempo estamos accionando y reaccionando a lo que pasa en nuestro entorno pero no nos damos momentos de reflexión para analizar las cosas.

Yo siempre he sostenido que los problemas en el trabajo son una fortuna, ya que la capacidad de resolverlos es parte muy importante de lo que se toma en cuenta para analizar la valía de las personas que colaboran en las empresas, mientras más problemas logres solucionar y menos problemas escalen por encima de tu nivel jerárquico, más posibilidades tienes de ser reconocido y que se te premié con un mejor puesto. Sin embargo muchas veces cuando lo problemas en cierta área son constantes, no solo deben resolverse, hay que analizar que esta causando el problema y atacar la causa, para ello requerimos tiempo y usar nuestro intelecto, es decir pensar, para buscar las mejores soluciones.

Los problemas que son recurrentes, deben atacarse desde la raíz y de esa manera evitar que sigan ocurriendo constantemente.

En muchas empresas o con ciertos estilos de liderazgo el dedicar tiempo a pensar en el problema para tratar de encontrar la solución, no se ve con buenos ojos, muchas personas que no lo ven a uno “chambeando” todo el tiempo, tienen la idea de que se esta perdiendo el tiempo, sin embargo cuando un problema se presenta constantemente y continuamos aplicando la misma medida que hemos venido tomando, solucionaremos el problema pero no lograremos que deje de presentarse.

Hay empresas, muy admiradas, que tienen una política muy abierta para permitir a los colaboradores que dediquen tiempo a relajarse y pensar con claridad, es impresionante pero varias de estas empresas son hoy en día parte de las compañías más innovadoras, populares y valiosas del mundo de los negocios. Ejemplos como Google, Microsoft y Apple entre otras empresas, donde privilegian el tiempo que sus colaboradores se dedican a buscar la mejor manera de encontrar una solución a un problema específico, ¿Cómo lograr una mejor búsqueda en internet?, ¿Cómo desarrollar un mejor software para el uso masivo a nivel internacional y en diferentes idiomas?, ¿Cómo diseñar de mejor manera un aparato para que las personas paguen el precio que uno pide por el mismo, sin fijarse en la competencia? Lograr estas respuestas requieren muchas horas de análisis, de pruebas, de errores, dedicación a pensar enfocados en la meta que se persigue.

Trata de dedicar por lo menos el 5% de tus horas laborables a pensar sobre tu trabajo, sobre cómo hacer mejor las cosas, sobre cómo mejorar un proceso que desde tu punto de vista es perfectible, sobre cómo mejorar el producto o servicio que tu compañía ofrece, sobre cómo cautivar a más y mejores clientes, sobre cómo tener una mejor presentación de ventas, sobre cómo realizar un mejor networking que incrementen tus prospectos, entre muchos otros tópicos. Siempre hay algo en que pensar y si haces de ésto un hábito, en muy poco tiempo te vas a diferenciar del resto de los empleados y estarás escalando puestos.

Las soluciones a los grandes problemas, pueden ser sencillas, solo requiere uno dedicar unos minutos a pensar, enfocado y sin interrupciones, date el tiempo y haz la diferencia.