Déjate entrenar, para crecer.

13 Vistas
10 Oct 2016

Todos tenemos áreas de oportunidad en las cuales podemos trabajar,  reconoce tus debilidades y exalta tus virtudes.

Muchas personas que han tenido algo de éxito en algún aspecto de su vida ya sea  estudiantil, laboral o deportivo por poner algunos ejemplos,  sienten que sus logros se deben enteramente a su esfuerzo y  sacrifico personal, lo cual por supuesto es parte de la ecuación del éxito, pero el trabajo realizado en conjunto con  los maestros, jefes o entrenadores es decir aquellos que los han apoyado y guiado durante el proceso que los llevó a éxito es sumamente  importante y en muchas ocasiones no es considerado como un factor importante en el éxito obtenido.

entrenamiento

Nuestros padres juegan el rol de guías cuando somos niños, en nuestra primera infancia nos dejamos guiar sin cuestionar lo que nos dicen, para nosotros la palabra de mamá y papá es la verdad absoluta, así aprendemos a caminar, a hablar, a comer entre muchas otras actividades básicas. Posteriormente vamos interactuando con personas que nos van dejando una huella como pudieran ser nuestros hermanos, tíos o abuelos. Personas cercanas que no tienen que ejercer el rol de guía pero que lo hacen y nos van llenando con su conocimiento para tener una perspectiva de la vida desde  visiones diferentes a la que nos plantean nuestros padres

Hay personas que van a ir tocando positivamente nuestras vidas, nuestros padres, maestros y entrenadores, deja que te guíen.

Una vez que entramos a la escuela, hay maestros que para bien o para mal van a ir marcando en gran medida nuestra existencia. Un buen o mal maestro puede incidir en las materias que nos gusten y con ello en la carrera que decidamos estudiar. Un buen maestro  estará al pendiente de las habilidades que cada alumno tenga y podrá apoyarlo a darse cuenta de qué es lo que se les facilita y con ello  ayudar a que  tengan eso en cuenta  al momento de decidir la carrera a estudiar.

En el campo deportivo una vez que decidimos practicar algún deporte lo  vamos a tener que aprender y ahí un entrenador nos ayudará con los  pasos básicos de ese deporte. Así podremos seguir aprendiendo y lo importante es siempre tener cerca un coach  que te vaya  mostrando los  errores que puedes mejorar, que te haga ver tus  virtudes en el deporte para que las explotes al máximo. Es tanto el camino por recorrer y la posibilidad de seguir creciendo en el campo deportivo que los atletas ranqueados en el número 1 del mundo y poseedores de los records mundiales siempre tienen un entrenador que estará buscando como ayudar al atleta a seguir mejorando.

Pero una vez que empezamos a trabajar  no le damos a el hecho de tener un coach y dejarse coachear la importancia que realmente tiene. Siempre hay puntos en los que podemos mejorar, como vendedores podemos ser muy buenos prospectando pero  no tener un buen porcentaje de cierre sobre los prospectos trabajados. Por otro lado podemos ser grandes cerradores pero  no tener suficientes clientes para ver. Podría ser que  somos muy buenos para vender pero el ticket promedio de nuestras ventas es muy bajo en comparación con la media de la empresa, entre muchos otros aspectos que podríamos analizar. Aquí es donde nuestro gerente o director nos podría apoyar a seguir creciendo, pero hay que estar abiertos al coaching de nuestra parte y que haya disposición de  dar coaching por parte de nuestro superior, lo cual en muchas ocasiones no sucede.

Yo te recomiendo en todo momento verte como una persona  que está en plena evolución con muchas posibilidades de crecer.  Acércate a los líderes de tu empresa y pídeles retroalimentación honesta con respecto a tu trabajo, si hay áreas en las que ellos te pueden apoyar, solicítalo, de no ser así investiga quienes son las personas que podrían apoyarte y busca que las contraten en beneficio de la empresa y por supuesto en tu propio beneficio. Si realmente ven tu interés en crecer y si tu crecimiento representa una oportunidad de mayores ingresos para tu empresa, estoy seguro que no debieran de ponerte objeciones para hacerlo.

Pide retroalimentación honesta, permite que te comenten los errores que cometes, trabaja en ellos y mejora consistentemente.